History
UN RESUMEN DE NUESTRA HISTORIANo somos un grupo reciente. Cuando Frontier abrió las puertas de su universo a las facciones creadas por los usuarios, los Pilotos Libres de la Alianza fuimos uno de los primeros grupos de jugadores en querer aprovechar la oportunidad que se nos brindaba. Unidos como una pequeña familia desde verano de 2015, fundamos nuestra propia facción menor, la Alliance Democratic Network, buscamos un sistema sede donde empezar y desde entonces el grupo ha trabajado para lograr llevar nuestros humildes objetivos a los sistemas circundantes.
El resultado ha sido que tanto PLA como ADN, tras todo este tiempo, se han mantenido como un grupo de jugadores estables dentro de un cúmulo de usuarios enorme y disperso como el que engloba Elite Dangerous, mostrando estabilidad y ganas de seguir hacia adelante, lo cual es un pequeño mérito.
Los éxitos han sido poco estridentes, pero notables: nuestra facción menor, la Alliance Democratic Network, se ha expandido a lo largo de varios meses a más de una decena de sistemas alrededor del sistema Yoruba, siendo la facción controladora en muchos de ellos. Se han librado guerras y votaciones democráticas, se han ganado y perdido batallas, se han cuidado los detalles y organizado a pequeña escala nuestras acciones como grupo. Pero, por encima de todo, nos hemos divertido haciéndolo juntos. Porque quizás somos pocos, quizás no somos estridentes, quizás no formamos parte de los grupos numerosos y profesionales que luchan por objetivos a gran escala en el Imperio o la Federación o en campañas Powerplay.
Pero, qué demonios, nos lo pasamos bien, nos ayudamos como una pequeña hermandad, somos libres de hacer lo que se nos antoje a nivel individual cuando así lo deseamos. No nos juzgamos los unos a los otros, podemos perdernos meses en el espacio sin responder a la llamada y ni uno solo de nuestros camaradas nos lo reprochará. Tenemos rangos y naves de nuestros rivales, el Imperio y la Federación, y los lucimos como si fueran obra de nuestros inexistentes astilleros.
Y todo ello, ¿tiene un objetivo? Sí, en el fondo seguimos siendo leales a la Alianza, a los sistemas libres, a la democracia y a los ideales de nuestra jefa Julia Cross. Si además de divertirnos juntos podemos derribar alguna que otra dictadura, ampliar la influencia de nuestra facción, quebrar algunas corporaciones por el camino y ganarle algunas batallas a la grandes potencias en nuestros sistemas, pues oye, más divertido resulta hacerlo por una causa con motivos roleros que sin ella. ¿No os parece?